La candidiasis del pezón puede presentarse durante la lactancia en una mujer a la cual se le pudo haber administrado antibióticos por otra infección o que haya tenido fiebre del heno ella o algún familiar.
A pesar de que la candidiasis es una afección común de la piel no es normal que aparezca en una piel sana, por el contrario ésta aparece en una piel con una cierta anormalidad, en una piel húmeda o tibia, por ello la candidiasis durante la lactancia es común porque el bebé se alimenta, moja los pezones, luego se secan y suelen resecarse, lo cual puede llegar a formar un eccema con grietas en los pezones, donde la cándida puede infectar y va a aparecer como puntos blancos.

Para prevenir la candidiasis del pezón se debe evitar el eccema que se asocia con el secado y las grietas del pezón, no usar el jabón común para lavar los pezones por el contrario usar cremas o ungüentos basados en parafina o productos con lanolina, cambiar de forma seguida los parches para los derrames de leche y no usar los parches de plástico. Para tratar la candidiasis del pezón se puede usar una crema con cortisona siempre que sea recetada por el médico ginecólogo o dermatólogo, ya que ésta se puede usarse en conjunto con una crema específica contra la candidiasis.

Antes de amamantar lavar los pezones con agua. Si la candidiasis empeora, lo más aconsejable es evitar la lactancia por unos días hasta tanto se recupere el pezón para evitar las reinfecciones. Cuando la candidiasis ya se a controlado y mejorado el pezón se puede usar de forma regular cremas humectantes sobre los pezones fin de evitar la recidiva y por supuesto evitar el uso del jabón común. Ante el primer síntoma de dolor o grietas en los pezones lo mejor es recurrir a médico personal para que éste recomiendo el mejor tratamiento según su criterio profesional.