Si bien la buena alimentación en general es de vital importancia para la embarazada, el pescado ocupa un lugar de cabecera en el plan de dieta durante el embarazo. Muchas veces se ha hablado de la importancia del pescado en una alimentación saludable, pero la mujer embarazada debería consumir una mayor cantidad de carne blanca proporcionada por el pescado, debido a su aporte de grasas poliinsaturadas, las cuales intervienen en que el sistema nervioso central pueda tener un mejor funcionamiento, luego es un buen aporte de proteínas y como sal mineral, el aporte de yodo es importante para el buen desarrollo del bebé en gestación.

Debido a que existe mucha controversia en cuanto al consumo del pescado azul durante el embarazo es importante su elección y hacer una variación de la alimentación para incorporar proteínas no solamente del pescado sino del resto de los alimentos ricos en ellas. También es preciso prestar atención a que no todos los alimentos de mar o río son pescados. De hecho los crustáceos y los moluscos no son pescados. No se trata de carnes de fácil digestión y además cuentan con un alto porcentaje de colesterol, por lo tanto no son recomendados durante la etapa del embarazo.

El pescado congelado es apto como alternativa al pescado fresco, ya que se encuentra limpio, sin espinas y listo para su preparación. Dependiendo de cada persona en particular puede gustar o no debido a que a veces puede cambiar su sabor, sin embargo no tiene contraindicaciones. Puedes y deberías ingerir pescado si te encuentras embarazada por tu propia salud y por ende para la salud de tu bebé en gestación pero siempre observa que se encuentre muy bien cocido. Nunca ingieras pescado crudo durante el embarazo. En líneas generales todo tipo de carne ya sea la carne blanca de aves o la carne roja de ternera debe encontrarse muy bien cocida sin que por ello no se trate de una carne jugosa y apetitosa sin que llegue a resecarse durante la cocción, la cual debe ser a punto, par lograr una buena digestión sin riesgos de consumir bacterias propias de la carne cruda.